Cerca de lo que fue el Convento de los Templarios en Venecia, surge una iglesia cuyo nombre parece una provocación: San Moisés. No se trata de error u homonimia alguna, el interior contiene imágenes del Profeta en el Sinaí y la fachada muestra dos camellos que protegen un obelisco. A pocos pasos un teatro que insistía en llamarse San Moisé, fue sede de una importante etapa de la historia del melodrama. Allí entre fines del siglo XVIII e inicios del siglo siguiente, floreció un genero de ópera en un acto, la farsa, que fue estudiada por David Bryant entre otros. Compositores conocidos de la época escribieron farsas para aquel teatro, como Mayr, Portugal y … fundamentalmente Rossini. Se trata de estructuras dramáticas simples, sin coro, con pocos cambios de escena y con un intento de abolición de la “cuarta pared”, es decir la distancia…
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