España - Andalucía

Gonzalo di Cordoba: la herencia de Domínguez-Nieto

José Amador Morales
viernes, 16 de junio de 2023
Antonio Reparaz © Dominio Público Antonio Reparaz © Dominio Público
Córdoba, sábado, 3 de junio de 2023. Gran Teatro. Antonio Reparaz: Gonzalo di Cordoba, tragedia lírica en tres actos con libreto en italiano de Luis Bertocchi, estrenada el 5 de Marzo de 1857 en el Teatro São João de Oporto. Jorge Morata (Gonzalo), Auxiliadora Toledano (Zulema), Suzana Nadejde (Isabella), Javier Povedano (Alamar), David Cervera (Muley), Fran García (Omar), Andrés Merino (Lara). Coro de Ópera de Córdoba (Alejandro Muñoz, director del coro). Orquesta Joven de Córdoba. Orquesta de Córdoba. David Fernández Caravaca, director musical.
0,0004563

La idea era, ha sido y es indiscutiblemente genial e inédita en bastante medida en Córdoba. Y es que llevar a los atriles una ópera de gran formato del gaditano Antonio Reparaz (1831-1886), compuesta para el Teatro São João de Oporto apenas unos meses después de su llegada al mismo como director musical, y presentarla al público actual ciento sesenta y seis años después de su estreno suponía todo un acierto y despertaba verdadero interés. 

No obstante, la propuesta original tiene un nombre y apellidos que ha sido conveniente y orwellianamente silenciado cuando se ha materializado la idea. 

Y es que Carlos Domínguez-Nieto, en los años que ha estado al frente de la Orquesta de Córdoba, ha venido recuperando obras líricas relacionadas con la ciudad de la Mezquita que habían sido olvidadas y que el director madrileño encontró buceando en los archivos de la SGAE. 

Pieza enlazada

Prácticamente a razón de una por año desde 2018, los cordobeses han podido volver a disfrutar de las zarzuelas Viva Córdoba de Quinito Valverde, El patio de los naranjos de Pablo Luna, La leyenda mora de Gerónimo Giménez o La chiquita piconera de Ramón Villalonga. Y en esta línea, el rescate de una ópera como Gonzalo di Cordoba, el célebre Gran Capitán, era una apuesta personal de Domínguez-Nieto que, evidentemente, no podía imaginar que sería destituido de forma vergonzante – para los promotores – hace unos meses y en plena temporada.

Portada de «Gonzalo di Cordoba» de Antonio Reparaz. © Dominio Público.Portada de «Gonzalo di Cordoba» de Antonio Reparaz. © Dominio Público.

Compuesta cuando Antonio Reparaz contaba veintiséis años y recibida con gran éxito, Gonzalo di Cordoba narra la historia de amor entre Gonzalo Fernández de Córdoba, el “Gran Capitán”, y Zulema, la hija del rey de Granada Muley-Assem, con un trasfondo de vicisitudes bélicas y religiosas. 

Musicalmente, la ópera presenta una curiosa fusión de estilos belcantistas bajo el amparo del primer Verdi. Tanto el preludio como sobre todo los coros recuerdan muchísimo a los que el compositor de Busseto incorporó en obras como Nabucco, Ernani, I lombardi alla prima crosciata, I due foscari, Attila… y que sin duda Antonio Reparaz conocía tras sus escarceos como director musical por Italia, Francia y España cuando compuso Gonzalo di Cordoba entre 1856 y 1857. 

Sin embargo las escenas solistas van basculando entre los dúos indudablemente donizettianos como el que protagonizan Gonzalo y Zulema en el primer acto o el trazado claramente rossiniano de la gran escena de Isabella en el segundo.* Todo ello bajo una orquestación e inspiración melódica bastante irregular que llegó a resultar algo pesante en una versión que superó las dos horas de música y sin producción escénica como la que comentamos. 

Además, solo se contó con el aliciente de una voz en off que situaba el argumento, que por otra parte no había sido facilitado en el programa de mano, y los correspondientes subtítulos en tiempo real. Sin embargo no hubo atisbo de movimientos teatrales entre los solistas, parapetados tras sus atriles, o de atrezzo elemental como sí se había llevado a cabo en las zarzuelas antes señaladas. En la actualidad, las versiones operísticas en concierto han superado la presencia de atriles y partituras y suelen ser acompañadas de una mínima dramaturgia, que facilitan el seguimiento y entretenimiento por parte del público; y no digamos si se trata de un título absolutamente desconocido.

A ello habría que añadir una interpretación correcta pero muy – muy – de mínimos. El Coro de Ópera de Córdoba se vio sobrepasado por la cantidad y enjundia de su cometido, apareciendo ya desde el principio calante y con serios problemas de empaste a pesar de la innegable entrega y entusiasmo de sus componentes. 

«Gonzalo di Cordoba» de Antonio Reparaz. © 2023 by Rafael Alcaide.«Gonzalo di Cordoba» de Antonio Reparaz. © 2023 by Rafael Alcaide.

Tampoco fue un gran día para una Orquesta de Córdoba de sonido mate y en general demasiado apocada. A su frente David Fernández Caravaca hizo lo que pudo, que no es poco, ante el peso del encargo. El joven director cordobés concertó básicamente, acompañó a cantantes y coro y sacó adelante de forma un tanto metronómica una partitura que necesitaba mayores dosis de intensidad, empuje y contrastes.

Los cantantes solistas mostraron una gran solvencia a nivel general, entre los que destacaron la Zulema de una Auxiliadora Toledano musicalísima y de fraseo refinado y la Isabella de Suzana Nadejde, de segura coloratura y apabullante proyección vocal. Entre las voces masculinas, destacó nuevamente un consistente y sólido David Cervera como Muley, que ya sorprendiera en su actuación el Requiem de Verdi el pasado mes de enero, un entregado Javier Povedano cuyo Alamar le planteó no pocos obstáculos técnicos en el primer acto, y, finalmente, un Jorge Morata en un Gonzalo de Cordoba algo falto de apoyo pero con una línea de canto de innegable buen gusto.

Notas

En este punto sentimos contradecir el texto del maestro Emilio Casares incluido en el programa de mano, quien seguramente no había escuchado la obra y afirma la ausencia en ella de todo “rastro de Rossini”; por cierto, un texto incomprensiblemente firmado de nuevo por un tercero.

Comentarios
Para escribir un comentario debes identificarte o registrarte.