El aspecto musical es el que sale fortalecido en un capricho escénico que obvia y prescinde voluntariamente del preciosismo de una música de exaltado lirismo, que no ve su correspondencia sobre el escenario
Sin duda es necesario revisar a los compañeros de ruta de Puccini, quien sin embargo tanto se distinguió de ellos y consiguió imponer casi todas sus producciones frente al olvido en que cayó todo el grupo de la ‘giovane scuola’, a excepción de algunos títulos (las dificultades vocales tienen mucho que ver)
La labor escénica y vocal del coro fue estupenda aunque no particularmente larga, y la orquesta estuvo sensacional a las órdenes del autor que obviamente supo cómo hacer frente a cada momento y recibió una gran ovación casi a cada presentación ante el pupitre.
'Norma' es una de las cumbres del romanticismo y como está escrito amor y muerte van juntos y los amantes culpables perecen en las llamas.Aquí ha habido que innovar también y sólo le toca ese destino al procónsul mientras Norma sufre otro tipo de castigo que no revelaré para no hacer un spoiler, pero que adecuadamente es el remate final de tanto disparate.
El espectáculo presentado por Ollé, una revisión de la puesta en escena original en Dresde, tuvo el inconveniente de ser fuente de constantes ruidos por el frecuente cambio de plataformas giratorias.Si hubo un error conceptual fue el de convertir un texto y música que no son realistas en un relato continuo en el que se aprovecharon los interludios para ‘rellenar huecos’ que no hacían falta
Esta era una ‘reposición’ no anunciada, seguramente debida a la situación creada por el virus y a la necesidad de hacer un homenaje a Strehler con una de sus producciones más celebradas.Es la tercera vez, en unos treinta años, que Keenlyside encarna en La Scala al Conde.
Corte del Palazzo Ducale.Arianna a Nasso (Stuttgart, Hoftheater, 25 de octubre de 1912), libreto de H.von Hofmannsthal, música de R.Strauss.Puesta en escena: Walter Pagliaro.Escenografía y vestuario: Jamie Vartan.
Hay que descubrirse ante Kunde-Calaf: como se sabe su timbre no es una maravilla, pero hoy incluso en el agudo estuvo radiante.Algunas veladuras en centro y grave en algunas frases menos ‘importantes’ de los dos primeros actos son tributo a la edad sin duda.
Fue una nueva puesta en escena muy tecnológica ella, con mucha proyección, luz, espadas láser tipo 'Guerra de las Galaxias' vinieran o no a cuento, trajes de robot y robots, una grúa que maniobraba para abrir y cerrar partes del escenario con el coro en general con muy poco movimiento, un mandarín vestido en el peor estilo revisteril, una Liù que parecía salir de una película de 1940 de Cecil B.
Wilson cantó una excelente Ariadna, bien interpretada en sus dos vertientes de cantante caprichosa y trágica de escena.La voz está en un gran momento y ningún agudo ni grave la puso en dificultad y el centro es ancho y cálido.