En total serán más de 30 las obras (casi una cuarta parte del catálogo del compositor) que serán interpretadas, dos de ellas en calidad de estrenos absolutos.
Péter Eötvös se muestra como un delicado miniaturista, enfatizando las tensiones eróticas a través de los vínculos entre pares instrumentales opuestos en su tesitura, como el clarinete bajo (verdadero apoyo armónico de la partitura) y la flauta, o el violín y el violonchelo, perfilando con un fino pincel acústico lo masculino y lo femenino
«El patio de los naranjos» (1916) es interesantísima por su frescura melódica y por su bella orquestación.Destacan la introducción, a manera de fresco musical sobre el que se suceden las primeras escenas, y especialmente por la escena central en la que se funden la romanza de Carmela y el coro de monaguillos que bromean y juegan frente al sacristán (un homenaje a la escena similar de «Tosca» según Domínguez-Nieto).
La garra emotiva la puso la plasticidad de los movimientos de La Moneta, convertida en oficianta de una ceremonia que comenzó con un introito-bulería-fantasía rítmico cautivador, en el que todos los partícipes procesionaron al salir al escenario.
La Casa da Música de Oporto ha presentado su programación del año 2021 que, en esta ocasión, estará dedicada a Italia, incluyendo una gala de ópera con la soprano italiana Daniella Schillaci y el tenor griego Angelos Samartzis para poner voz a la música de Verdi y Puccini.
Ha sido presentada ya la VII edición de Formentor Sunset Classics, uno de los festival de música clásica más importantes de la isla de Mallorca, que desde su nacimiento en 2013 se ha convertido en una de las citas ineludibles del verano mallorquín gracias a la presencia de figuras como Daniel Barenboim, Lang Lang, Ainhoa Arteta, Hilary Hahn, Kiri Te Kanawa, Zubin Mehta, Roberto Alagna, Olga Peretyatko, Gustavo Dudamel o Leticia Moreno.
Palau de la Música Catalana.Leticia Moreno, violín.Orquesta Sinfónica Camera Musicae.Tomàs Grau, Director.A.Piazzolla: Cuatro Estaciones Porteñas.A.Ginastera: Suite del ballet ‘Estancia’, op.8ª I.Stravinsky: El Pájaro de fuego.
La nueva temporada de la Orquesta Sinfónica Camera Musicae ha sido articulada para mostrar las variadas sonoridades que ofrece el repertorio sinfónico.Para ello han seleccionado obras imprescindibles de compositores que marcaron un antes y un después en el desarrollo del lenguaje musical y cuyas aportaciones fueron fundamentales para descubrir esa mágica conexión que existe entre la música que escuchamos y las emociones que sentimos.
Las orquestas sinfónicas vascas comienzan sus temporadas de abono con dos programas muy distintos, pero no del todo alejados.La Sinfónica de Euskadi ha optado por Carmina Burana, la popular obra de Orff cuyo O Fortuna tanta gente conoce -y al parecer admira-: una obra programada para atraer al público al auditorio del Euskalduna y para que salga satisfecho gracias al seguro buen rendimiento del Orfeón Donostiarra, siempre en lo alto, y de unos solistas solventes con Carlos Mena, Susanne Elmark y Peter Schöne.