La mejor entre los cantantes fue Pirozzi, una Abigaille de lujo, impertérrita en los agudos, con graves buenos y excelente centro, capaz de realizar las notas filadas que la partitura -tremenda- le pide ya desde su entrada hasta la escena de su muerte.
Con el objetivo de rellenar dos horas de espectáculo, el sainete lírico ha sido ampliado en esta propuesta con otros fragmentos de zarzuelas madrileñas.No es la primera vez ni será la última que se haga esto, pero los añadidos son buenos si son útiles y aportan a la trama de la obra principal, si no, es un aderezo inútil y un flaco favor a la ligereza de acción, un argumento sencillo y, que posee un título como "La revoltosa".
Robert Gleadow sobreactuó llenando la representación de bailecitos, tics y muecas repetidos.Estas tonterías intoxicaron no sólo la acción sino también los concertantes y alcanzaron su clímax en los saludos finales.
Aunque se ha hablado de sucesión de Nilsson, Stemme y Flagstad, en estos momentos por sus centros y graves, y su indisimulado afecto por autores italianos como Verdi y Puccini, al oír a Davidsen pensé en la joven Varnay cuando en el Met cantaba no sólo Wagner sino Maria/Amelia en unos raros entonces 'Macbeth' o 'Simon Boccanegra'.
Rathkolb examina las impresiones de Carl Orff entre 1923 y 1933 para situarlas en el contexto del período posterior a 1933.Otros temas son el de la observación política de que fue objeto el compositor a causa de su éxito musical, así como su proceso de desnazificación con los correspondientes protocolos de los interrogatorios a los que fue sometido, incluidos los que se consideran perdidos.
The new production of 'Falstaff' was a success on nearly all fronts.Sir David McVicar’s energetic, lightly ribald staging made easy work of the densely-plotted action while the vigorous musical direction of Paul Daniel and a strong ensemble led by the charismatic Falstaff of Quinn Kelsey ensured that the intricacies of the score emerged with absolute clarity.
Con el pasar del tiempo mi voz y yo nos vamos entendiendo.Como un matrimonio.Con respeto, tolerancia y paciencia.Entiendo qué cosas me cuestan más, qué roles podrían ser los justos y cuáles debo probar o no.
La única línea coherente seguida en este 'Ocaso' y esta tetralogía es la del desquicio total y absoluto de la relación entre la palabra y la música perpetrada por una dirección de escena pueril.Este fue un 'Anillo' sin magia, emociones, sentido épico o consistencia dramática.
El hilo conductor del programa estuvo constituido por la misión del jesuita español Diego de Pantoja (1571-1618) a principios del siglo XVII, como homenaje musical en el 450º aniversario de su nacimiento.