Thalheimer, que ya había hecho una producción de 'Parsifal' para este mismo teatro, vuelve a su gusto minimalista creando una versión más propia de un oratorio que operística
En la carrera de la pianista María Solinís Riobello ha desarrollado destacan su labor solidaria y la creatividad para fusionar distintos tipos de artes.Ahora presenta en el Centro Cívico de Zorroza de Bilbao su tercera edición de Emakumearen Taupadak, los latidos de la mujer.
Tras el comentario de diez de los motetes de Bruckner en la anterior entrega de esta serie dedicada a la música sacra de Bruckner, continuamos ahora con los otros siete.Se incluye también un comentario de la discografía de estos motetes.
La Ópera Nacional de París, que alberga también una Escuela de Danza y una Academia destinada principalmente a jóvenes cantantes, ha decidido montar una serie de representaciones apoyándose en los dos cuerpos citados.
Al final la florista y Charlot se reencuentran.Ella ha recuperado la visión y ambos bailan un arrebatador pas de deux con fragmentos de la música de Luces de la ciudad.
La parte musical fue muy interesante por la actuación de la orquesta y su director aunque no entiendo el ‘aura’ que ha hecho que algunos al final del espectáculo corearan su nombre y apellido ‘Jordi Savall’.
Quería que la ropa fuera un cúmulo de contradicciones.Para añadir un toque cómico, llevaba un pequeño bigote que no ocultaba la expresión de mi rostro.La ropa parecía llenarme del espíritu del personaje.
Isolda canta su muerte de amor despojándose de su vestido victoriano y abandona la escena caminando hacia un fondo de bruma luminosa en pantalones negros y blusa blanca: es así que finalmente logra transcender la atmósfera de opresión general para esfumarse como una mujer contemporánea, un mito wagneriano actualizado a nuestros días