Carlos Dominguez-Nieto supo arropar en todo momento a las voces y llevar de la mano a unos conjuntos inexpertos en sus respectivos cometidos, ofreciendo una lectura de gran belleza e indudable eficacia dramática
Perles cosechó un éxito innegable en una producción en la que ni el director de escena, Maestrini, que le hizo cantar tumbada en varias ocasiones, ni el director musical, Montané, que desplegó una implacable tormenta decibélica a lo largo de la función sin piedad para los cantantes, se lo pusieron fácil
Ignacio García, que de teatro lírico español sabe bastante, apuesta por espacios abiertos, moviéndose entre azafranes y espigas de maíz, con la señorial y adusta presencia de los caserones manchegos
El trabajo de Francisco López es puro teatro.La concisión de la trama reducida a sus elementos esenciales -y, por ende, universales- proporciona una claridad a la historia al mismo tiempo que una condensación dramática impresionante.
Un discurso moral impúdicamente patriarcal, reforzado por la constante dependencia de las protagonistas femeninas 'ciudadanas' de sus protectores masculinos, que son quienes las defienden, pelean por ellas, y se apropian de sus éxitos;
Vicky Peña es una Antigua de esas que hacen historia, tal es su espontaneidad y descaro en escena, quien encuentra su perfecto alter ego en el áspero y rudo Chinchorro de Pep Molina, un dúo que encumbra el buen teatro hablado, el del disparate y surrealismo que define a estos dos personajes.
Farinelli tiene de lo mejor y lo peor de su autor, y las ambiciones musicales de su autor están meridianamente claras:
un eclecticismo en el cual se aúnan el melodrama francés, un grandilocuente tratamiento orquestal heredado del wagnerismo, una expresión vocal enfática propia del verismo italiano y un leve carácter bufo que se amolda a la época histórica en que se desarrolla la trama.
Sin prescindir del texto original el planteamiento escénico de Paco Azorín reinventa la trama original de la obra, creando una historia nueva, diseñando una dramaturgia paralela al inocente idilio de amor entre los pastores Maruxa y Pablo, y a los infructuosos intentos de dinamitarlo por la antipática pareja de primos Rosa y Antonio, ávidos de rapiña amorosa, que verán trastocados sus planes por el providencial ardid de Rufo, el capataz, ese feliz trasunto de pícaro.
Palau de les Arts.Madama Butterfly, tragedia japonesa en tres actos, con libreto de Giuseppe Giacosa y Luigi Illica, a partir de la obra teatral homónima de David Belasco, a su vez basada en un relato de John Luther Long, y música de Giacomo Puccini.