La London Philharmonic bajo la égida de Ed Gardner con Ólafsson al piano desató una eclosión de aclamaciones.El suntuoso sonido, especialmente de las cuerdas, pero también de los vientos, así como la formidable cohesión de este conjunto excepcional con el solista convenció desde un comienzo, causando gran emoción en la platea.
Como violinista de taberna, Bruckner tenía que dominar el repertorio habitual -en gran parte de memoria-, así como los textos de las canciones y las danzas, estas últimas a menudo improvisadas espontáneamente.
En Erinnerung casi se puede oir la instrumentación de una gran orquesta;las arpas en la sección central, seguidas por las trompas, trompetas y trombones.Tras un gran crescendo la música se esfuma como por arte de magia y solo queda la imagen de un bello sueño.
El inmenso abanico de formas de expresión musical de Wilhelm Grosz quizá revele menos un estilo personal individual que un talento especial para saber utilizar juguetonamente los respectivos nichos musicales en cualquier momento.
El estreno de "Facetten der Liebe" abrió la función con un lenguaje muy sobrio, moderno y directo, a través del cual North traza aquí la naturaleza de las relaciones amorosas en diferentes constelaciones y fases de la vida.
Brönnimann no pareció manifestar ninguna afinidad por Bruckner.Su interpretación fue cuadriculada, el fraseo careció de la menor flexibilidad, los bloques sonoros se sucedieron sin que intermediase la necesaria tensión en las transiciones, y la orquesta muchas veces sonó sucia.
La triunfadora indiscutible de la noche fue la soprano Miren Urbieta-Vega que revistió a Mimí de sinceridad y sensibilidad, envolviendo al personaje con su dúctil instrumento de leve tono oscuro en el timbre y un agudo seguro y brillante.
A partir de 2025, la Orquesta Sinfónica de Viena trasladará su primavera musical a Trieste y ofrecerá tres conciertos en el marco del recién fundado festival.Todos los conciertos, que tendrán lugar el fin de semana de Ramos, serán dirigidos por Petr Popelka, director titular de la orquesta.
El Ballet Clásico de Cuba Laura Alonso posee una cantera de bailarines que se ha formado siguiendo el testigo de la matriarca hasta conseguir una compañía sólida, compacta y de gran personalidad sobre las tablas